Catedral de la Inmaculada Concepción de Cárdenas sufragada en una buena parte por algorteños con la estatua de Colón delante.
Pero al otro lado del charco, durante la noche del 5 de Agosto, en una provincia cubana, Matanzas, un rayo ha provocado una fuerte explosión en uno de los tanques de combustible de su zona industrial. El segundo tanque con combustible colapsó después de casi 40 horas ardiendo, causando una enorme masa de fuego que iluminó toda la ciudad y se vio hasta en el malecón habanero.
Otra noche trágica de un siniestro que comenzó en el tanque 52 de almacenamiento de crudo, y que se ha cobrado la vida de una persona hasta el momento, mientras se siguen reportando según van pasando las horas más desaparecidos. A pesar de la ayuda dispensada por otros países de la zona que se han volcado en ayudas y solidarizándose con sus autoridades, el fuego, que provoca un humo altamente contaminante, sigue imparable habiendo alcanzado ya otros tanques de combustible que explosionan a su vez.
Como he dicho, esto está sucediendo en Cuba, en la provincia de Matanzas. Ya el propio nombre da una idea del porqué se llama así. En varias ocasiones y a varios alcaldes, les he planteado la posibilidad de realizar un “hermanamiento” a modo de reconocimiento más que de homenaje con el pueblo de Cárdenas que, precisamente pertenece al Departamento o Provincia de Matanzas. Este pueblo de algo más de 150.000 habitantes está sólo a 38 Kms del epicentro de la catástrofe y también está sufriendo sus consecuencias.
Este pueblo de Cárdenas no está elegido al azar. A finales del siglo XVIII y en la primera mitad del XIX, fue el epicentro de la emigración de la juventud algorteña, muchos de ellos marinos de profesión o familiares de estos, que buscaban una vida mejor para ellos y sus familias. Apellidos como Zabala, Cortina, Líbano, Aldecoa, Abaroa, Sarría, Landaida, Ibarra, Amézaga, Larragordia, Ugarte, Astobizaga, Arrieta, típicamente algorteños surcaron los mares yendo a varar en la bahía de Cárdenas. Algunos de ellos, no todos, gracias a la creación de ingenios azucareros con nombres tan típicos como el de “San Nicolás de Algorta”, consiguieron su anhelo y volvieron a su tierra, la nuestra, con un patrimonio saneado que sirvió, gracias a su generosidad, para que Getxo, muy atrasado por la extrema pobreza existente entre sus habitantes y su aislamiento sobre todo educativo y medios de vida, se pudiese enganchar al progreso y ponerse a la altura de los demás pueblos.
Varios de ellos, a su regreso, fueron grandes benefactores, donando una buena parte de su patrimonio para la consecución de escuelas para los niños pobres (la mayoría), asilos para enfermos y ancianos, iglesias de las que Algorta carecía, etc…ya que las Instituciones Públicas carecían de medios por las continuas Guerras Carlistas con las que estaban obligados a colaborar económicamente. Incluso después de 112 años sigue existiendo una Fundación, de la que Ud ostenta la Presidencia por el mero hecho de ser Alcaldesa, y que todavía dispone de fondos de ayuda para familias a las que no les alcanza ni para pagar los estudios primarios de sus vástagos.
Tenemos una deuda nunca pagada con Cárdenas, incluso un algorteño fue Alcalde de su población y allí se guarda un gran recuerdo de su persona. Y, ya que hasta ahora, nadie ha considerado esta posibilidad, solicito para este pueblo cubano, abrumado por la desgracia del fuego, una ayuda económica como las que se han realizado para otras comunidades necesitadas y que se estudie dicho “hermanamiento” como ya lo tiene con Filadelfia (EEUU). Cárdenas, su población y toda la provincia de Matanzas, se lo merece.
Atte.
Plaza Molokoff
